viernes, 10 de julio de 2009

Otro más. De censura, el Diario La Nación y el abuso de poder

Insulza está sentado en una oficina oscura con una gran biblioteca de fondo. Arroja sobre el escritorio la foto de una mujer y se pasa el dedo índice por la garganta en señal de sentencia de muerte. Así me imagino pudo haber sido lo que pasó con la suspensión del trabajo de Montserrat Nicolás en la OEA.

La historiadora, ferviente bloguera y autora de Curvas Políticas colaboraba desde el 2007 y hasta hace algunos días para el diario La Nación (Chile). Durante estas semanas había estado cubriendo las "entretenidísimas" reuniones y lobbys que se dieron en la Organización de los Estados Americanos a raíz del golpe de estado en Honduras. Todo desde sus oficinas en Washington DC.

Pero parece que su intromisión, su lengua o sus ‘curvas’ no le gustaron al señor “panzer”, el cual mandó a que La Nación le quitara el piso en la corresponsalía. Así, mediante el tráfico de influencias, el autoritarismo característico de los políticos, una diplomacia de lo más matonezca y tan sólo una llamada telefónica, el diario chileno la despojó de su acreditación.






Les dejo la carta que Nicolás envío al Secretario General del OEA y su versión de los hechos .



domingo, 5 de julio de 2009

Honduras dominguero


Vea en Telesur (en vivo) lo que está pasando en hondras mientras su presidente electo retorna al país a enfrentar a los usurpadores de mandato.


No opinaré sobre la "imparcialidad periodística" del canal, salvo que al menos son honestos en asumir su postura...

lunes, 29 de junio de 2009

lo que le importa al sistema

El jueves murió Michael Jackson, quien no sólo fue el “rey del pop” sino también excéntrico artista acusado de numerosos casos de pedofilia y con una clara adicción a la cirugías plásticas. Claro, MJ vendió 750 millones discos en sus 46 años de carrera musical y ganó más de 400 premios. Hizo bailar como zombies a la generación de los 80' y se volvió un icono retro para las generaciones más jóvenes. Hizo y deshizo a su antojo y se murió de un paro cardíaco como hasta el 2006 se morían 7.2 millones de personas al año. Incluso según datos del año pasado, las cardiopatías son la primera causa de muerte mundial.


Paralelo a este “importantísimo” duelo mundial, Honduras sufría una crisis institucional que no se había visto en el continente desde el termino de la guerra fría, mientras Irán vivía el clímax de sus protestas y represiones a causa de las denuncias de fraude electoral. Sin embargo los medios de comunicación y los consumidores de estos están, desde el jueves pasado, más preocupados de los homenajes radiales y televisivos a MJ y de colapsar las redes sociales con el asunto.


Google explotó sus índices de búsqueda, tanto que confundió este evento con un ataque de denegación masivo, por lo que bloqueó por varios minutos todas las búsquedas de noticias relacionadas al tema. Facebook triplicó su nivel de posts, mientras que algunos sitios de noticias llegaron a tener 3 millones de lectores por minuto y el tema acaparó el 90% de Twitter. Las cifras demuestran por tanto, que la muerte de un ídolo vale más que dos países.







sábado, 20 de junio de 2009

lo de Perú, lo de siempre

Hace un tiempo atrás discutíamos con mi amigo Manuel, lo beneficioso o pernicioso de este asunto de los biocombustibles. Más allá de lo que algunos puedan pensar de su ecologismo y promoción al desarrollo sustentable, siempre hay una mano invisible que mueve los asuntos de todo esto; y yo siempre tiendo a sospechar, cuando esa mano es yanqui. Porque si hay algo en lo que U.S.A nos lleva la delantera a todo el mundo, es en no dar puntada sin hilo.

Sin ir más lejos. Las protesta de los últimos dos meses en el Perú, lideradas por indígenas amazónicos -y que según fuentes parciales les constó la vida a más de 200 nativos- lograron esta semana derogar dos de los nueve decretos legislativos aprobados el año pasado por el gobierno de Alan García, en el marco del TLC con Estados Unidos.



Las dos normas en cuestión, permitían y promovían la tala de 45 millones de hectáreas de bosques primarios para el cultivo de los famosos biocombustibles.

Pero no cantemos victoria aún. Esta derogación es sólo un triunfo parcial, pues aún faltan otros siete decretos que se encuentran, actualmente, suspendidos y que refieren a la consideración de las comunidades indígenas, cuya opinión en estas materias era escuchada hasta entonces.

Aunque nos suene paradójico que un padre decida quitarle el pan de la boca a su hijo para dárselo al vecino, García ve de lo más normal el hecho de quitarle la voz a ‘su’ pueblo para dárselo a otro; y no a cualquiera, sino al que poco a poco se ha convertido en el amo del universo, a punta de invasiones libertadores, guerras contra el terrorismo, intervenciones en dictaduras y el último grito de la moda: los famosos TLC.

Comienza ahora un proceso de asilos políticos para los lideres nativos, tiempo suficiente para acallar tensiones, desviar la mirada de la comunidad internacional y de los organismos de derechos humanos. Tiempo suficiente para hacer la guerra sucia y aplicar esas estrategia silenciosas de los gobiernos contemporáneos, a los cuales ya estamos tan acostumbrados. Táctica clásica de mandatarios como García, que en su versión pasada se han robado la mitad del oro del Perú, promocionó una gran cantidad de violaciones a los derechos humanos, dejó el país a merced del genocida Fujimori y tiene aún cuestionados nexos con el narcotráfico.


FOTO BBC MUNDO

LEER MÁS:

Los decretos de la discordia según la BBC

Pronunciamiento de los obispos de la Amazonía ante el paro de las comunidades nativas (Colectivo Andamios)













miércoles, 17 de junio de 2009

apaguemos la tele

En septiembre del año pasado dejé mi departamento en Santiago de Chile, puesto que me venía a “las Europas”, se suponía que al mes siguiente. Todos mis bienes fueron embalados, repartidos, concesionados o regalados. Entre ellos mi único televisor de 14 pulgadas, que fielmente me había acompañado gran parte de mis años universitarios. En la casa de un amigo tuve la oportunidad de ver hasta el aburrimiento la televisión por cable. Pero cuando llegué aquí ya no hubo más TV y creo que fue la mejor decisión que he tomado en mi vida.

Distanciada de la telebasura, mi biblioteca se duplicó en cosa de meses, junto con mi disco duro. Incluso tuve que adquirir un segundo disco externo. Ya no me angustio por el rebrote de la violencia en las calles, el supuesto aumento de los robos (¿son los robos o las denuncias?) incluso, puedo asegurar con toda propiedad que no le temo a la Gripe A.

No confundamos esto con desinformación o falta de preocupación por los temas que nos aquejan como sociedad. Me mantengo al tanto de lo que pasa en el mundo y en mi país más y mejor que cuando tenía la Tele monopolizando mi “sensibilidad informativa”. Pero ocurre algo distinto con informarme por los medios escritos, digitales en su grandísima mayoría. Los periódicos (manejados por los mismos cerdos de siempre) presentan en sus versiones digitales sus respectivos comentarios y foros de discusión, que entregan más antecedentes que las 4 “entrevistas” editadas al “ciudadano común”, clásicas de los noticieros y matinales. Contrasto información con otros medios oficiales y blogs y no corro el riesgo de engancharme burdamente con la teleserie de turno.

A quienes no me crean aún (y es que no tienen por qué) los invito cordialmente a hacer el experimento. Apaguen la TV un par de meses y luego de eso me cuentan qué tal se sienten. Les aseguro que este ‘ejercicio’ no los matará.



IMAGEN CAIF 2008

domingo, 14 de junio de 2009

compartir es bueno, pero ¿para quién?


Cuando yo era pequeña decidí ir a una feria de las pulgas a vender algunos cachureos de casa que ni regalar se podían. Me habían dicho que en estas ferias libres de cosas usadas la gente compraba de todo, aunque estuvieran inservibles, ya que los repuestos eran los útiles. Así es que agarramos un bolso y fuimos con mi hermana a probar. Llegamos temprano en la mañana a fin de alcanzar un buen lugar y en media hora habíamos vendido todo. Entusiasmadas y con dinero de sobra en nuestros infantiles bolsillos, decidimos recorrer la feria a ver si encontrábamos algún cachureo para nosotras. La sorpresa nos la llevamos a medida que avanzamos y descubrimos en los otros puestos nuestras antiguas pertenencias, pero a mayor precio. ¡Qué estafa! –pensamos-. Desilusionadas le contamos a nuestro padre que habíamos sido víctimas del injusto mercado. Él nos explicó que no era así. Que a diferencia de nosotras, el resto de los feriantes consideraba esto su negocio y que nos habían pagado el valor que nostras habíamos decidido y en ese sentido no había problema alguno. A ellos les tomaría el día entero vender nuestros productos. Nosotras en cambio, podríamos marcharnos a casa temprano con el dinero que contemplábamos obtener desde un principio.

Lo mismo pasa con la colaboración en línea. ¿Estaremos con nuestro tiempo y trabajo enriqueciendo a nuevas net-empresas? Con cada enlace que yo pongo en Delicious le doy tráfico, visibilidad y ventas a otras empresas o plataformas. Si participo en cualquier espacio online de ‘prosumidores’ (el concepto de moda), les doy ideas a los empresarios de diversos rubros. Lo mismo si subo una foto a Flikr, e incluso al utilizar redes sociales como Facebook, le ahorro millones a empresas consultoras de estudio de mercado y casi sin darme cuenta.

¿Qué ganamos entonces con todo esto? Tiempo y sabiduría. Ese conocimiento e información acumulada nos va sirviendo a todos. La hora que yo tardo subiendo mis páginas frecuentes los etiquetadores sociales se suma la hora de Pedro, Juan, Diego y el resto de miles de usuarios y finalmente nos ahorra la búsqueda de información. Los más destacados son los que en laboratorios de ideas o fábricas colaborativas de productos ganan su merecida recompensa; Pero de momento hacemos y compartimos en esto porque queremos. Mi miga de pan se suma a las otras millones de miguitas y finalmente creamos un pan de mejor calidad. Si algunos se benefician vendiendo sus plataformas o mediante publicidad, es un cuento más de fondo y que el que no podremos estar de acuerdo. Pero esa lucha, señores, la ganaremos solo cuando nos hiper-empoderemos de estas nuevas herramientas y la sabiduría colectiva logre aunarse en criterios comunes de desarrollo humano y con respecto a la visión que tenemos de lo que es justo o no para nuestra sociedad. Y será recién entonces, que abriremos esas grandes alamedas.